lunes, 4 de marzo de 2024

Enhorabuena al Banco Popular Dominicano, en si 60 aniversario


El Festival Internacional Arte Vivo y Casa de Arte, Inc. felicitan a uno de nuestros principales patrocinadores, el Banco Popular Dominicano, por la celebración de su 60 aniversario, precisamente en la ciudad de su fundación, Santiago de los Caballeros. El eslogan original de su campaña publicitaria, el "Banco de las Ideas", es muy apropiado, ya que en sus seis décadas ha demostrado una visión amplia y solidaria apoyando todas las iniciativas progresistas dirigidas a mejorar la calidad de vida de los dominicanos. Nos dio mucho gusto ver, en el evento celerado en el @centroleon, la actuación de Sandy Gabriel, uno de los duendes de Arte Vivo, junto a la talentosa Techy Fatule, comunicando el mensaje motivacional "Cuando tus ideas se cumplen" de la nueva campaña institucional del banco originado por santiagueros visionarios. Enhorabuena y gracias por acompañarnos desde 1987.

@popularenlinea #artevivo

domingo, 3 de marzo de 2024

Eliminar financiamiento público a Partidos Políticos?

Pensando en la infinidad de partidos que sin méritos se benefician del Erarario dominicano, me parece interesante la medida tamada por Javier Milei, presidente argentino, de eliminar la financiación pública de los partidos políticos. En Argentina, a partir de ahora, cada partido político debe financiarse con aportaciones voluntarias de donantes o afiliados políticos. 

Invito a leer esta reflexión sobre este y otros tópicos relacionados, originalmente publicada el 20/07/2022 en el digital Acento.


Frente a la crisis de representación en nuestra democracia: candidatos independientes

Es tiempo de que los ciudadanos dominicanos empecemos a empoderamiento  para alcanzar nuestro propio sueño, propiciando condiciones que garanticen que el erario deje de ser un botín y el Congreso un bestiario.



Los ciudadanos no se ven reflejados en los políticos y partidos tradicionales que, carentes de ideología y compromiso social, realizan, indiscriminadamente, prácticas clientelares para conseguir o mantenerse en el poder. Pocos ya aceptan de buen grado consignas inspiradas en el servicio al "partido" o "a los míos” para después servir al país. En una real democracia, como la que aspiramos, un bien particular no puede estar por encima del bien común. Es hora de escoger para el servicio público a ciudadanos que sean "uno entre muchos", sin liderazgos heredados ni comprados, que, sobre el interés pecuniario, destaquen por sus valores y capacidades profesionales vinculadas a la defensa de derechos, que muestren un historial de acciones tangibles a favor de sus comunidades. Todas las crisis nos obligan a pensar fuera de la caja, y eso es lo que propongo hacer a continuación.

En aras de un libre ejercicio de la democracia representativa, la ley electoral dominicana debiera ser revisada, siempre de acuerdo con el artículo 22 de la Constitución, para que todos los ciudadanos puedan elegir y ser elegidos en igualdad de condiciones. Me atrevo a proponer la incorporación de la figura del “candidato independiente” para todos los cargos políticos electivos. Pienso que lo ideal sería que todas las candidaturas de ciudadanos, afiliados o no a partidos, se presentaran individualmente, en igualdad de condiciones, con normas que regulen estrictamente los gastos de campaña, que obliguen a un uso de medios publicitarios de manera igualitaria, e incluso que obligue a los organismos electorales a presentar a todos los candidatos en las boletas de votación sin logotipos partidarios.

No, no es un dislate, tampoco una utopía irrealizable. Así, haciendo visible al candidato por sus cualidades y propuestas, sin ventajas estructurales partidistas, se garantizan los derechos de la ciudadanía en países como Inglaterra y Australia. Este esquema permitiría que los ciudadanos con talento y vocación que no pertenecen a la aristocracia partidista ni cuentan con aplastantes recursos (legales o no) se presentasen a las elecciones. También propiciaría, gracias a la diversidad de opciones, una mayor libertad de elección para los votantes. Todo esto señalamientos son coherentes con lo que establece el Artículo 22 de nuestra Constitución al definir los “Derechos de Ciudadanía”, que no están condicionados por una pertenencia a un partido político. Obviamente, acomodar o sanear nuestro sistema electoral de esta manera no resulta atractivo para los partidos políticos tradicionales, pues, aunque no los eliminaría del sistema eleccionario, los hace obsoletos, al convertir en gastos innecesarios los miles de millones de pesos que reciben anualmente del presupuesto nacional para financiar sus actividades proselitistas.

Según el Artículo 22, son derechos de ciudadanas y ciudadanos:

1) Elegir y ser elegibles para los cargos que establece la presente Constitución;

2) Decidir sobre los asuntos que se les propongan mediante referendo;

3) Ejercer el derecho de iniciativa popular, legislativa y municipal, en las condiciones fijadas por esta Constitución y las leyes;

4) Formular peticiones a los poderes públicos para solicitar medidas de interés público y obtener respuesta de las autoridades en el término establecido por las leyes que se dicten al respecto;

5) Denunciar las faltas cometidas por los funcionarios públicos en el desempeño de su cargo.

Creo fervientemente que la habilitación de “candidaturas independientes”, es el mejor camino para que los ciudadanos elijan personas calificadas, íntegras y con verdadera vocación de servicio. Siguiendo el espíritu original del famoso "E pluribus unum" que fundó el sueño de los Estados Unidos de América, nación que siempre tomamos como modelo, pienso que es tiempo de que los ciudadanos dominicanos empecemos a empoderarnos para alcanzar nuestro propio sueño, propiciando condiciones que garanticen que el erario deje de ser un botín y el Congreso un bestiario.

Si al final esta reflexión es solo un sueño, es el de una nación mejor.

#JavierMillei #Democracia #Partidos #Financiamiento



viernes, 23 de febrero de 2024

"Carnaval, carnaval", tema de Fernando Cabrera, Tercer lugar Premio Anual de Música Luis Díaz.

 


Carnaval, carnaval

Martes, 20 Febrero 2024

Santo Domingo.- El Ministerio de Cultura anunció este martes la celebración del gran Desfile Nacional de Carnaval 2024, el cual tendrá lugar el domingo 17 de marzo en la avenida George Washington de Santo Domingo.

La fiesta más importante de la cultura popular dará inicio a las 2:00 de la tarde y contará con un amplio despliegue de seguridad a fin de garantizar que todas las familias disfruten de lo mejor de los diversos carnavales del país en un solo evento.

El anuncio fue realizado en una rueda de prensa celebrada en la sala Manuel Rueda de las Escuelas de Bellas Artes, acto que estuvo encabezado por la ministra de Cultura, Milagros Germán, acompañada por el viceministro de Identidad Cultural y Ciudadanía, Ramón Pastor de Moya; el director de Participación Popular, Josué Gómez, y José Miguel Llaverías, encargado del Departamento de Carnaval.

Durante su intervención, la ministra dio a conocer que el Desfile Nacional de Carnaval se dedicará a la provincia de San Cristóbal, reconocimiento que obedece a su rico patrimonio cultural y al hecho de poseer un carnaval en ascenso que lo han hecho merecedor de numerosos premios en las últimas ediciones de esta popular celebración.

Posteriormente, Germán reveló que el título de rey del carnaval recaerá en esta ocasión en el talentoso artista y diseñador Luis Rivas, mientras que la distinguida comunicadora Jatnna Tavárez encarnará a la reina de la festividad.

Ambas figuras fueron coronadas en el marco del acto por la ministra Milagros Germán, quien resaltó los méritos del rey y la reina que fueron tomados en consideración para su selección.

Anuncio de premios Felipe Abreu y Luis Días

Adicionalmente, en dicho acto la institución hizo entrega del premio Felipe Abreu al Mérito del Carnaval Dominicano 2024 a Juan Óscar Souffront Rodríguez (Yanco), quien fue elegido por sus invaluables aportes en pro del fortalecimiento y proyección del carnaval dominicano. 

Asimismo, se anunciaron los ganadores del Premio Anual Luis Días de Música del Carnaval Dominicano 2024, en los que se premian obras musicales inéditas y de calidad que incluyan música, instrumentos, ritmos y melodías de índole carnavalesca, y que supongan un aporte destacado e innovador a esta celebración.

Los ganadores fueron Yohansy Rodríguez, primer lugar con la canción “A la calle voy a parar”; Charlie Santana, quien con el tema “Carnaval en RD” obtuvo el segundo lugar, y Fernando Cabrera, quien se alzó con el tercer lugar por “Carnaval, carnaval”.

Además de las mencionadas distinciones, fueron entregados reconocimientos a la Alcaldía de San Cristóbal, la Gobernación de San Cristóbal y a la Unión Carnavalesca de San Cristóbal (UCASANCRI) por sus aportes al desarrollo del carnaval dominicano.


lunes, 1 de enero de 2024

El pico Duarte o la recuperación del Yo



Fernando Cabrera

Por muchas razones enero es un espacio temporal distinto, su esencia sugiere lo que es primero y quizás por eso en su regazo tantos individuos se replantean la vida y fijan cada año sus expectativas, sus metas más caras, quizás por eso otros tantos, en su mayoría citadinos y burócratas a horario completo, deciden hacer un aparte dentro del agobiante ritmo de su cotidianidad para recuperar algo del espíritu nómada ancestral y se enfrascan en la búsqueda de aventuras. De estos últimos, el gesto heroico más socorrido es la conquista del paisaje montañoso, siendo los más empinados y difíciles, los que más llaman a la atención. El ángel de seducción y rey de pedestres nostalgias será por antonomasia, entonces, el Pico Duarte, con sus ‎3,175 metros por encima del nivel del mar, en una Cordillera Central que parte, como corazón, en mitades la isla; erigiéndose vigía natural de los valles más hermosos que ojos humanos han visto, enarbolando una primacía antillana, tan inmensa como ingenua.



En enero, cuando menos llueve en esos ermitaños parajes de pioneras fábulas, nuestros modernos exploradores y amazonas, pertrechados de utensilios rudimentarios, contadas viandas (víveres y especias enlatadas), así como de confitería para endulzar el polvo, se lanzan con un atrevimiento rayante en la locura a recobrar la esencia de la naturaleza virgen, el aire puro, los mil caminos de arcilla y sol definidos como arterias entre empinadas cuestas y tupida vegetación, entre el canto dicharachero de las cotorras silvestres y el recelo de puercos cimarrones. Cientos de improvisados Robinson Crusoe, buscan la intimidad que brinda el rocío en los árboles, el rayo de luz en la escarcha, el agua en la roca, y las lágrimas del vértigo que nace del asombro en el cielo. Los hijos del smog y el stress toman por asalto esta tierra prometida, a sabiendas de que en sus entrañas se encuentran las minas de sabiduría del rey Salomón y los secretos de alquimia para la juventud eterna.


Como se aprecia, al abandonar la sordidez del asfalto y el concreto de las paredes, de repente se resarce la identidad fluvial del sueño, la utopía de ser; se ve y se siente todo líquido, pues cuerpo y mente se empapan de real vitalidad, en una suerte de entrega que no concibe el egoísmo. Al pico Duarte ¾nunca nombre mejor puesto¾, no llega la fiebre del oro, el afán de lucro desmedido, tampoco el puñal artero que prepara los peldaños para el ascenso social. Por esta vez, la cima es un bien por demás conocido, compartido y amado: el marmóreo rostro del prócer y una tricolor bandera como patria.

En esta peculiar odisea hasta las alturas, que también es, en aparente paradoja, hacia el interior de nosotros mismos, actúa como ente unificador el frío, el cansancio de las grandes caminatas, el calor del fuego en las cocinas de tablas y en las fogatas donde los cuerpos se reúnen y se buscan, la camaradería que impulsa el instinto de supervivencia, al son de relatos de ciguapas y desaparecidos en boca de guardias forestales y guías de rutas y reatas de mansas bestias. Esos hombres nobles y rudos que pasan sus días entre bucólicas faenas, tal vez por el ocio creativo y las verdades sencillas que la soledad prolongada encierra, desarrollan, igual que los marineros, un espíritu dispuesto para el buen ron y la fantasía; de ahí que no ha de extrañar la fascinación que siembran en los que por necesidad hemos extraviado las creencias y la esperanza.

Así como las tribus primitivas de casi todas las civilizaciones incluían entre las pruebas a superar por sus guerreros en etapa de formación, el enfrentamiento de las fuerzas de la naturaleza (la real y la creada a partir de la propia imaginación), como forma de templar anatomías y voluntades, estas voluntarias excursiones a la vastedad del silencio engendran la plenitud de un diálogo interior, donde los protagonistas se ven reflejados tanto en la bóveda celeste, en el titilar sugerente de sus astros, en la canción que silba el viento entre el follaje, en las mariposas que se desdibujan en las fuentes de aguas cristalinas que a poco confluyen para definir grandes caudales de vida.

Es aquí en medio de esta estirpe de pura trascendencia donde fluyen, como en secuencia de imágenes de un especial cinematógrafo, los eventos más radicales de nuestra historia personal, los olores y sabores que se han hecho manchas indelebles en nuestra memoria, las preguntas sin respuestas repetidas mil veces y otras tantas olvidadas; es donde se hace posible vislumbrar puertas prometedoras de terrenal felicidad.  Cuán grato resulta recuperar en detalle a ese extraño íntimo que somos…

 

 

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Cabrera, Fernando. Imago Mundi. Obras. Colección Fin de Siglo. Consejo Presidencial de Cultural. Santo Domingo, 2000.

 

Cabrera, Fernando. El pico Duarte o la recuperación del Yo. En: J. A. Almánzar, Antología Mayor de la Literatura Dominicana, Prosa II. Santo Domingo, 2001. Fundación Corripio. Pags. 594-595